Las 49 + 1

Las 49 + 1
Ultima serie de 50 obras sobre los Chakras

domingo, 4 de abril de 2010

LA SAGA DE LA FAMILIA DAMIANI: LA TRISTE HISTORIA DE ADA DAMIANI


Ada, hermoso nombre, casi celestial. Pero la historia de Ada carece de elementos celestiales.
Sus padres siempre fueron muy estrictos con ella, entre muchas otras cosas, no le permitieron conocer el amor. Claro, el concepto de amor a principios del siglo XX, cuando Ada nació, no es el que existe ahora. Y el destino que habían elegido para Ada era el de permanecer soltera toda su vida. ¿Qué deudas pagaba Ada con su soltería? Nunca lo supo. Ni tampoco se lo dijeron. Solo espantaban a cualquier posible pretendiente que se le acercase. Ella jamás debía abandonar a sus padres, y de hecho, nunca lo hizo.
De chica había sido muy sumisa, cuando hablaba, su madre tapaba su discurso con su propia voz y su padre, apenas si se sentaba a hablar con ella. Porque Ada no hacía preguntas, aceptaba que las cosas eran como eran.
Y la querían, pero no sabían que hacer con ella. La percibian como distinta, hablaban de su ignorancia - como padres - en la crianza de niños pero tampoco tenían a quien consultarle sobre cual sería la mejor manera de criar a Ada. Y Ada jugaba sola, inventaba personajes, hasta el día que su madre le pegó porque se puso un tul blanco y pretendió ser una novia. Le dijo "nunca vestirás el ropaje del placer" (o al menos es lo que las crónicas reportan que le dijo).
Y Ada llegó a la adolescencia, sentía cambios en su cuerpo, sentía deseos de tener amigos, pero las puertas de la casa eran como las de una fortaleza infranqueable. Y miraba pasar el mundo, la gente, la vida, a través de los vidrios de la ventana de su cuarto.
Nunca le celebraron un cumpleaños, ponían excusas para que nadie entrase a la casa. Le aseguraron que ni siquiera haría falta que pensara en trabajar, su padre proveería por ambas mujeres, su madre y ella. Ada añoraba salir, sabía que afuera había un mundo que valía la pena ser vivido, el mundo de principio de siglo, las calles bullían con inmigrantes y curiosos personajes del barrio.
El día que Ada cumplió 19 años, la llevaron a un estudio de fotografía, para que Ada fuese retratada. Cuando el fotógrafo le pidió que sonriese, Ada miró a la cámara y el fotógrafo tardó en sacar la foto, no solo porque las máquinas fotográficas de principio de siglo tenían una velocidad de exposición muy lenta sino porque sus ojos se habían nublado por la emoción de ver a aquella bella jóven pidiendo ayuda a través de su mirada. Ada clamaba por vivir, con desesperación...
Cuando le entregaron la fotografía revelada, Ada recorrió los contornos de la figura con su dedo índice, como si estuviera reconociendo sus límites - y sus limitaciones. Una mujer encerrada en el cuerpo de una mujer. Una mujer que no era mujer. Una mujer que no llegaría a saber lo que es ser mujer.
Habían pasado apenas dos días luego de la toma de la fotografía, y un 20 de junio de 1919, Ada se fue a dormir como tantas otras noches. Pero esta noche fue distinta. Luego de sus rezos, pidió con todo su corazón, no despertar más.
Y esa noche tuvo un sueño, venía alguien vestido de blanco a buscarla. Acariciaba su pelo y le prometía que si dejaba que la llevase, sonreiría para siempre, lejos de su casa, en libertad. Su espíritu gozaría de la libertad que nunca había tenido.
Ada se levantó, abrió la ventana. El gélido frio de la noche de un invierno temprano le golpeó el rostro, mas pálido que nunca a la luz de la luna.
Y caminó, entre la bruma, hacia el río. No sintió cuando su cuerpo se hundió en el agua, no sintió cuando el agua llenó sus pulmones impidiéndole respirar, no sintió cuando el lodo del fondo del río ennegreció su blancura... porque es solo un sueño, penso.
Cuando a la mañana siguiente Domenica Damiani, abrió la puerta del cuarto de su hija, desesperó al no verla en la cama y ver la ventana abierta. Ada había dejado algo detrás, su fotografía. Domenica la tomó con lágrimas en los ojos y con su mano derecha, tapó su boca ahogando un grito sin tiempo: en ella, Ada estaba sonriendo.

NX arte con Luis Formaiano « Nexo Asociación Civil

NX arte con Luis Formaiano « Nexo Asociación Civil