Las 49 + 1

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Ultima serie de 50 obras sobre los Chakras

sábado, 8 de septiembre de 2012

HUNDAN EL BELGRANO, UNA RECOMENDABLE EXPERIENCIA TEATRAL

Una fría noche de Septiembre tuve el placer de disfrutar de un espectáculo que me sorprendió más que gratamente. No solo por su calidad, sino porque además, reflotó memorias personales.
Cuando hundieron al Belgrano, yo estaba solo en mi departamento de Londres, ciudad donde viví durante cuatro años y en la que fui testigo de la "otra versión" de la guerra de Malvinas. Para no tener problemas laborales, en ese momento la oficina de Inmigraciones cambió mi ciudadanía por la de Italiano, aunque todos sabían que provenía de Argentina. Lo que nadie sabía, pero realmente nadie, era donde quedaban las Malvinas...
La obra de Steven Berkoff, que fue escrita en 1986, satiriza sin concesiones la brutalidad de una guerra inútil. La puesta que pude ver en Buenos Aires es brillante. Con un tempo ágil, el texto dispara dardos que van componiendo una trama cuyo interés nunca decae. Son noventa minutos que mueven a la reflexión.
Escrita originalmente en verso, con referencias a los "dramas históricos" de Shakespeare, la traducción al castellano es rica, atrevida y con una cadencia uniforme.
El personaje que Berkoff llamó Maggot Scratcher, es aquí Amargas Cachas, secundada por Alcahuete y Piojo. Como Amargas Cachas, Monina Bonelli sobresale con una infinidad de matices que rayan lo surrealista. La secundan Gastón Rodriguez, un Alcahuete cuyos gestos e inflexiones de la voz acompañan a la perfección la desmesura de Amargas Cachas. Lo mismo puede decirse de Estanislao Milicich como Piojo. Este último es también el Comandante a cuya orden están los cuatro marineros interpretados por Gonzalo Pastrana, Gustavo de Filpo, Carlos Cano y Luciano Ricio, cuatro actores que también despliegan ricos matices. Los dos escenarios, el de la política y el del combate tienen en el relator un nexo que va enlazando los acontecimientos. 
En la vorágine de la escalada del conflicto hay una escena donde la Dama de Hierro muestra un rasgo de humanidad, el momento en que piensa sobre la muerte proxima de tantos jovenes soldados argentinos, una escena comparable a la que Stephen Frears logró en "The Queen", cuando Helen Mirren se encuentra sola frente a un ciervo. Es como si en ese momento aflorase algo sensible, que pronto se diluye porque la política así lo exige, no hay lugar para "debilidades" emocionales.
En suma, esta puesta, con dirección de Claudia Marocchi, es altamente recomendable, además tenemos el privilegio de ser uno de los pocos países que la tiene en cartel, ya que es la obra menos representada de Steven Berkoff.